Es casi como encontrar una aguja en un pajar”, así podría calificarse al hallazgo de una especie de lagartija cuyo registro científico no se había dado hasta el momento en todo el territorio de la provincia de Corrientes. Este reptil de hábitos nocturnos y con capacidad para mimetizarse en el terreno, fue detectado en las barrancas de la ciudad correntina de Bella Vista por un equipo de investigadores del Laboratorio de Herpetología de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales y Agrimensura de la UNNe
La importancia científica de haber encontrado esta especie, está relacionado fundamentalmente con la conservación. “La manera más sencilla y tradicional, es poner énfasis en la conservación de aquellos sitios naturales donde se registren la mayor cantidad de especies. La lagartija viene a engrosar el registro de la fauna reptil de Corrientes”, explicó el licenciado Eduardo Etchepare.
Se trata de un género que aún no se había encontrado, diferente a los que se ve comúnmente en la zona: la lagartija marrón y el lagarto overo. Además es el registro más oriental de esta especie conocido hasta el momento para la Argentina. Los ejemplares fueron colectados en una zona de barrancas denominado Toropi, situado a unos 10 kilómetros al sur de la localidad correntina de Bella Vista.
El equipo integrado además por María del Rosario Ingaramo; Camila Falcione; Roberto Aguirre y Carlos Barrios, colectó 4 ejemplares adultos (2 machos y 2 hembras) y un juvenil, que están depositados en la Colección Herpetológica de la Universidad Nacional del Nordeste.
Lo distintivo es que se trata de una lagartija de hábitos nocturnos, a diferencia de las que estamos acostumbrados a ver en la región. Vive oculta entre grietas y piedras. En zonas como el Chaco se las encuentra en los techos de paja de los ranchos.
De acuerdo a lo expresado por el licenciado Etchepare, los ejemplares de esta familia pueden alcanzar un tamaño máximo de 6 centímetros. “Su hábito nocturno es el resultado de la evolución de miles de años. De manera similar a los gatos, tienen pupilas verticales, que de noche adquiere mayor dimensión y permite más entrada de luz”.
Otra particularidad de la especie, es que se cortan de manera frecuente la cola como método de defensa. De ahí que pueda encontrarse esta lagartija con un tramo corto de cola.