EL DUEÑO DE LA NOCHE
Y luego comentó que Rousseff considera "importante" que haya mandatarios en la Jornada Mundial de la Juventud, que concluirá el domingo 28 de julio con una misa campal de Francisco.
"La presidenta hizo esas invitaciones a los presidentes de la región hace un día o dos, pero todavía no podemos confirmar quienes vendrán", dijo una fuente del Palacio del Planalto a la agencia ANSA.
Y luego comentó que Rousseff considera "importante" que haya mandatarios en la Jornada Mundial de la Juventud, que concluirá el domingo 28 de julio con una misa campal de Francisco.
Fuentes políticas indicaron a la agencia EFE que el presidente de Chile, Sebastián Piñera, y el de Panamá, Ricardo Martinelli confirmaron su presencia.
Al parecer, los presidentes asistirían a la misa del 28 de julio, con la que concluirá la XXVIII Jornada Mundial de la Juventud. Rousseff tiene previsto ir a esa misa, a la que se espera asistan unos dos millones de jóvenes de todo el mundo
Francisco recibirá a 2 millones de jóvenes del mundo entero. Hablará en público 17 veces, entre discursos y homilías. Visitará a presos y a enfermos de sida. Y se reunirá con políticos.
La agenda del Papa durante la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) en Río de Janeiro, del 22 al 29 de julio, tendrá un marcado tono social, acorde con el sentido que ha querido dar Francisco a su pontificado desde el comienzo: visitará una favela, irá a un hospital donde se trata a adictos a la droga, muchos de ellos afectados por el sida, y recibirá a jóvenes que purgan penas de prisión.
Además, muchos de los participantes de esta Jornada están realizando en estos díastareas solidarias en otras ciudades de América Latina, por ejemplo, como preparación al encuentro.
Río de Janeiro se transformará en una fortaleza para la visita de Francisco, tras la revuelta social que sacudió a Brasil en junio.
"Será la mayor operación policial jamás realizada en la historia de la ciudad", dijo a la AFP el secretario adjunto de grandes eventos de Rio de Janeiro, Roberto Alzir Dias Chaves.
Un total de "7.000 policías reforzarán a los 12.000 efectivos de la ciudad, sin contar a los 1.700 policías de élite de la Fuerza Nacional, los de la policía civil, de carreteras y la federal", precisó.
Las zonas turísticas y hoteleras, estaciones de metro y autobús serán vigiladas por la policía, así como las favelas consideradas más peligrosas.