La imagen de un rayo que cayó sobre la cúpula de la basílica de San Pedro del Vaticano horas después de que el papa Benedicto XVI anunciara su renuncia al Pontificado ha dado la vuelta al mundo, convirtiéndose en una de las fotografías más publicadas por la prensa.
La captura, obra del fotógrafo Alessandro di Meo, dio lugar además a todo tipo de especulaciones y comentarios en las redes sociales, donde algunos usuarios aludieron a la posibilidad de que el rayo sea fruto de algún tipo de designio divino, tras la primera renuncia de un jefe de la Iglesia católica ocurrida en 598 años.
En la fotografía se puede ver perfectamente cómo el rayo, que ilumina el cielo nublado y ya oscuro de noche cerrada en Roma, cae sobre la punta de la cúpula de la basílica vaticana, una extraña y curiosa coincidencia que contó con el importante acierto del fotógrafo a la hora de capturar el momento.
Muchas son las circunstancias que han envuelto en el misterio a esta fotografía y al fenómeno atmosférico que la protagoniza, lo que puede contribuir a que quede incluida en los anales de un día ya histórico para el pequeño Estado vaticano, cuyo jefe anunció este lunes, en latín, que dejará el cargo el próximo 28 de febrero.
La captura, obra del fotógrafo Alessandro di Meo, dio lugar además a todo tipo de especulaciones y comentarios en las redes sociales, donde algunos usuarios aludieron a la posibilidad de que el rayo sea fruto de algún tipo de designio divino, tras la primera renuncia de un jefe de la Iglesia católica ocurrida en 598 años.
En la fotografía se puede ver perfectamente cómo el rayo, que ilumina el cielo nublado y ya oscuro de noche cerrada en Roma, cae sobre la punta de la cúpula de la basílica vaticana, una extraña y curiosa coincidencia que contó con el importante acierto del fotógrafo a la hora de capturar el momento.
Muchas son las circunstancias que han envuelto en el misterio a esta fotografía y al fenómeno atmosférico que la protagoniza, lo que puede contribuir a que quede incluida en los anales de un día ya histórico para el pequeño Estado vaticano, cuyo jefe anunció este lunes, en latín, que dejará el cargo el próximo 28 de febrero.