Y acerca de la nueva frecuencia de su ciclo, que en vez de ser semanal irá de lunes a jueves, a las 21, señaló que “una hora se pasa volando... Me soportarán un poco más”.
Tras agradecer la gran cantidad de regalos y flores que le enviaron amigos y allegados, como todos los años en su debut, recibió a su gran invitada de la noche: Xuxa. La brasileña lucía espléndida, vestida de largo, con el pelo cortísimo, y su natural simpatía.
La charla transcurrió, relajada, como siempre sucede con Susana, quien a la hora de preguntar, jamás ha pretendido para sí el papel de periodista. Un tema fue el eje del diálogo: la relación de Xuxa con su hija Sasha, de doce años.
Así, ambas estrellas aparecieron como dos amigas en charla de sobremesa: Xuxa contó acerca del día en que su hija, de pequeña, le preguntó por el concepto de “tener sexo”, y la acorraló con una inquietud infantil: “¿Vos tuviste sexo con mi papá?” Xuxa dio rienda suelta a los relatos maternales. Y en un momento dado, llegó lo que no podía faltar, según las reglas no escritas de la TV en vivo: el llamado telefónico a Sasha, a modo de regalo sorpresa para su mamá.
“ Este es el show de Xuxa, y los saluda con amor./ Es la hora, es la hora, es la hora de jugar ”, cantaba la brasileña en el estudio, como en los 90, cuando su show hacía furor. “Xuxa y la Argentina, un romance que aún perdura”, se leyó en el videograph. Entonces, Xuxa retomó su minirecital, que acompañó con movimientos mucho más discretos que los de antaño, dado su vestido largo y ceñido.
“Hablemos del amor, del amor de pareja”, le propuso Giménez a su invitada extranjera. “¿Por qué estás sola?”, le preguntó. “Porque cuando alguien entra en tu vida, tenés que dar, y eso me deja angustiada, porque a mí me gustaría estar enamorada de alguien, pero no verlo todos los días” , respondió. Susana coincidió en que a medida que pasan los años, la gente se aferra más a su libertad. Xuxa le dedicó un párrafo al recuerdo de Ayrton Senna, su ex pareja. “El tenía mucha fuerza. No decía ‘casi te llamé’, llamaba. El tenía todo. Yo me preguntaba cómo podía tener todo lo que me gustaba en un solo hombre’”, confesó. Luego, habló de su relación con Luciano, el padre de su hija.
Xuxa dijo que no se había casado nunca y que no quiere hacerlo. Susana aseguró que no volverá a casarse nunca más en su vida, y argumentó en contra de la obligación de repartir los bienes gananciales en la instancia de divorcio. El diálogo derivó hacia las cirugías estéticas, la belleza y el paso de los años. Hacia el final , Xuxa reveló su intención de regresar a la Argentina “para hacer shows”. “Tal vez en julio o en agosto”, se animó a arriesgar.
Por su parte, Dady Brieva se presentó disfrazado del Conde Drácula e hizo su número cómico conversando con Susana.
A pesar de haber afirmado a Clarín que este año no se pasaría un solo minuto de las 22, Susana cedió a la tentación, y el programa terminó a las 22.14, con un brindis compartido entre la conductora, Xuxa y Brieva. La televisión, evidentemente, tiene sus tiempos propios.