Ricardo Martinek

Ricardo Martinek
Programa en vivo 96.3 Fm Alvear Con Estilo Propio

jueves, 12 de marzo de 2015

SER HUMILLADO LO PEOR:

EL DUEÑO DE LA NOCHE
Tantas cosas pasa el ser humano en ciertas localidades del país y en muchas de ella como se suele decir> no todo lo que brilla es oro?  Desde mis tiempos de adolescente aprendí que son pocas las personas que te aprecian y al mismo tiempo te respetan e entiendes de momentos difíciles, sin ir más lejos de mi pueblo natal estando a 150 kilómetros en la localidad de Santo Tomé corrientes, está la Ciudad de la Cruz, un pueblo a vera del rio Uruguay, don la gente vive de un modo peculiar de pueblito chico, reuniones entre amigos contados, vecindario sentados en la vereda de su casa disfrutando del mate en el atardecer, niños jugando en las veredas, cosas de pueblito pequeño, que en ciudad grande ni soñar…
Están aquellos que te ayudan y dan una mano cuando realmente necesitas. Te ayudan de verdad destacable en ese aspecto, pero no son todos los que piensan de la misma manera.
También está el lado negativo de más de la mitad de la población que solo vive del conocido y destacado (chisme y el hablar mal de todo lo puedan ver y escuchar) es un verdadero pan demonio.
 Es increíble haber vivido de mi oficio de comunicador radial durante cuatro largos años,  he cosechado pocas experiencias lindas de familia de humildad impecable y luchadores de sol a sol.
 Pero la cosecha mayor es el egoísmo y burla de muchos que viven del hablar mal de los demás a toda hora. Yo  me puse a prueba para comprobar. Que nuestra forma de expresarnos, andar, vivir, hablar con personas en la calle. Es motivo y razón para tener tema. Cosas que uno al observar ya le da bajas calificaciones.
Dicen que el respeto y la educación está primero en todo, bueno aquí eso realmente no tiene ni un valor. Como se comenta en estos pagos jesuíticos, la localidad tiene sus leyendas misterios y reglas de vida que son revelados todos los días. 
Con el recorrer de caminos voy conociendo mi país y su gente, sus culturas y formas de vida. 
Este oficio de ser un conductor radial donde me gano la vida trabajando por los medios  radiales y que no deja de ser un trabajo más como cualquier otro, tengo el lado malo de la moneda: hoy con mis 44 años de edad, y 30 años en este campo. Me duele decir que no somos respetados y valorados por todo lo hacemos por la gente. Que si ayudamos a alguien somos criticados al instante y si no lo hacemos es porque somos mala gente…
Pero lo escalofriante es ganarte la humillación.
Muchas otras cosas tenemos que soportar..