EL DUEÑO DE LA NOCHE
En algunas ocasiones y cuando puedo estar a solas conmigo me
detengo por completo para repasar mis acciones diarias y de aquellas que van
sosteniendo nuestro vivir. Decir que no he cometido errores es creerme perfecto
y ahí la falla de uno de los eslabones
de la cadena.
En lo largo de mi vida sigo los consejos de mis padres ya
que ellos nacieron en los tiempos difíciles y no tenían todo a su alcance como
tenemos en esta época, claro que a la vista de todos estamos volviendo de forma
lenta al siglo pasado. Muchos te dicen cosas que te dejan atrapado en una
lámpara como el cuento de Aladino. (La respuesta queda en total libertad de tu
imaginación); Hay dioses y profetas por todos lados decir que muchos ya nacen
con ese poder pero cuando tiene que ponerse de frente al destino la realidad es
otra. Aprender del que vivió muchas veces te ayuda a sobre llevar la triste
realidad en la cual estamos sumergidos de lógica ya sabes el resultado de ir
contra la corriente.
No te estoy dando consejos, solo estoy escribiendo lo que
pienso si bien se que me vas a criticar y es el segundo eslabón de la cadena a
reventar.
En término, si algo se rompe el resto de inmediato colapsa