Leonardo Acosta, a los 7m del primer tiempo, anotó el único gol de Patronato,
que terminó con diez jugadores por la expulsión de Ignacio Boggino a los 42m del
complemento.
River, en tanto, desperdició la ocasión de empatar a los
43m de la parte final, cuando el arquero Sebastián Bértoli le detuvo un tiro
penal a Alejandro Domínguez.
Con este resultado, River comparte la punta
con Instituto de Córdoba, con 70 puntos; seguidos a uno por Quilmes y Rosario
Central, que mañana se enfrentará a Chacarita y en caso de ganar se subirá en
soledad a lo más alto de la tabla.
River jugó un partido contra River y
perdió, una imagen constatada sobre todo en el segundo tiempo, cuando apenas
llegó en dos ocasiones hasta el arco de Patronato.
La primera, a los
39m, cuando Cirigliano remató desde fuera del área y la pelota salió apenas
desviada; y cuatro minutos después, cuando el "Chori" dejó el penal en manos de
Bértoli.
El primer tiempo fue intenso y lo tuvo a River prácticamente
como protagonista, pero Patronato lo madrugó y a los 7m anotó el gol que luego
le serviría para ganar el encuentro, por parte del mediocampista Leonardo Acosta
de cabeza, ante la pasividad de la defensa visitante.
Tres minutos
antes, David Trezeguet había quedado mano a mano con el arquero Sebastián
Bértoli -la figura de su equipo-, y éste le ahogó el grito al "apagado" goleador
francés.
River sintió unos momentos el gol tempranero de los
entrerrianos, pero a pesar de sus dificultades para sostener orden en el medio y
defensa, contó con varias ocasiones para empatar el encuentro.
Las más
claras: a los 27m Cavenaghi probó desde afuera del área, la pelota pegó en el
palo izquierdo y el rebote en la espalda de Bértoli para irse al corner; y unos
minutos más tarde Bértoli, en gran reacción, desvió un remate de Trezeguet.
En ese período, River se sostuvo en el empuje de Cirigliano desde el
fondo, pero realizado más por ímpetu que por claridad.
El segundo
tiempo, lo ya citado, dejó una imagen preocupante del equipo que conduce Matías
Almeyda. River no creó situaciones de gol. Estuvo inseguro en la marca y sin
ideas para la creación, a pesar de que los entrerrianos tampoco llegaron a
inquietar a Daniel Vega.
Patronato aguantó con tranquilidad ante la
impotencia y la falta de ideas de River y se llevó tres puntos para la historia.
La misma historia que River padece: todavía depende de sí mismo para lograr el
ascenso directo, pero el escenario de nervios dentro y fuera de la cancha,
similar a la promoción que terminó condenándolo al Nacional y a juzgar por lo
visto hoy en Santa Fe, le impide ver con claridad por dónde ir en este final de
camino.