Ricardo Martinek

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miércoles, 21 de octubre de 2009

ALERTA



la ciudad, cerca del nivel de alerta por inundaciones
El Paraná no da tregua y ya evacúan gente en Chaco

En la vecina provincia, revisan las defensas de Resistencia y las estaciones de bombeo; en Corrientes ya no quedan playas. El sábado, el río alcanzaría los 6.30 metros, a 70 centímetros del nivel de evacuación.



El Paraná no da tregua y sigue creciendo, tanto que en el Chaco ya evalúan evacuar gente en las próximas horas. Según cálculos de la titular de la Administración Provincial del Agua en la vecina provincia, Cristina Magnano, en el puerto de Barranqueras el río alcanzaría el fin de semana los 6.30 metros de altura y anegaría algunos barrios y caseríos bajos de esa localidad.Los conocedores de hidrología coinciden en que generalmente la altura del río Paraná en los puertos de Barranqueras y en el de Corrientes es idéntica o difiere mínimamente. De hecho el lunes, según las mediciones de Prefectura Nacional en la ciudad, era de 4.87 metros, la misma que los prefectos midieron en la localidad chaqueña.De esto se desprende que también en Corrientes el Paraná podría alcanzar los 6.30 metros de altura que calculó Magnano para Barranqueras. De ser así, la ciudad estaría a sólo 20 centímetros del alerta por inundación y quedaría a sólo 70 centímetros del nivel de evacuación, que para el puerto local es de 7 metros.Según Magnano, “en el puerto de Iguazú el río tenía una altura de 27 metros el lunes, si ese valor se mantiene en Barranqueras entre el viernes y el domingo habrá una altura de 6 a 6.30 metros”. Al respecto, el diario de mayor tirada de la vecina provincia, Norte, anticipó que Defensa Civil chaqueña “ya toma recaudos para evacuar a las poblaciones ribereñas que habitan zonas bajas que podrían anegarse”.El jefe de la Prefectura Corrientes, principal Rodolfo Héctor González, habló con la prensa local sobre la crecida del Paraná. Confirmó que según las previsiones que se están realizando de cara a los próximos meses, “difícilmente se pueda disfrutar de muchas playas como acostumbra el paisaje local”.Las afirmaciones de González no son ninguna novedad para aquellos que acostumbran a recorrer la costanera de la ciudad, donde la mayoría de las playas literalmente desaparecieron o se redujeron a menos de la mitad. Las imágenes más crudas se ven sobre la Costanera Sur, donde el río ya tapó paradores y amenaza a los pobladores de los barrios Caridi y Arazaty.En tanto que la situación no es mejor en el interior, donde varias localidades turísticas ya prevén colocar más arena a sus playas para poder atraer a turistas y no quedarse sin ese ingreso fundamental para sus economías. Entre las que ya anunciaron este tipo de medidas se encuentran Paso de la Patria y Empedrado.Pero la situación es mucho más difícil en Chaco, sobre todo en Resistencia, donde viven aproximadamente unas 450.000 mil personas. Allí ya se espera que la inundación, crecida del río y más precipitaciones mayores de la normal, afecten a barrio bajos si la capacidad de desagüe de la masa líquida acumulada dentro del recinto protegido por defensas es superada. Por ello se revisan los terraplenes y las estaciones de bombeo.


NOTA:de la republica

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