Durante la mañana de ayer, la temperatura anticipaba que la jornada sería sofocante. Y así lo fue hasta pasadas las 18.30, cuando se desencadenó el temporal. En la ciudad la sensación térmica superó los 36°. Pero luego del intenso calor, repentinamente, el cielo se oscureció, comenzaron el fuerte viento y la lluvia, por un breve lapso, antes de que los últimos rayos de sol regalaran un arco iris sobre el río.
Igualmente breve, pero mucho más destructivo, fue el temporal en Chivilcoy. "Por acá pasó un tornado, nunca habíamos visto algo así", graficó Carlos Arregui, de los bomberos voluntarios. "Están todas las plazas destruidas, hay vidrieras rotas. Los daños son innumerables", amplió el intendente, Aníbal Pitelli.
Además del casco urbano se produjeron inconvenientes en las rutas 30 y 5, donde varios camiones y autos debieron permanecer en la banquina porque algunos sectores estaban obstaculizados. El gobierno de la provincia de Buenos Aires envió a la zona personal de Defensa Civil, un helicóptero sanitario y refuerzos policiales para asistir a los damnificados y trabajar en forma coordinada con las autoridades sanitarias.
Igualmente breve, pero mucho más destructivo, fue el temporal en Chivilcoy. "Por acá pasó un tornado, nunca habíamos visto algo así", graficó Carlos Arregui, de los bomberos voluntarios. "Están todas las plazas destruidas, hay vidrieras rotas. Los daños son innumerables", amplió el intendente, Aníbal Pitelli.
Además del casco urbano se produjeron inconvenientes en las rutas 30 y 5, donde varios camiones y autos debieron permanecer en la banquina porque algunos sectores estaban obstaculizados. El gobierno de la provincia de Buenos Aires envió a la zona personal de Defensa Civil, un helicóptero sanitario y refuerzos policiales para asistir a los damnificados y trabajar en forma coordinada con las autoridades sanitarias.
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